El viernes pasado, Latam y Avianca sufrieron retrasos en sus operaciones. Esto afectó a miles de pasajeros que esperaban abordar sus vuelos. Los retrasos se debieron a una serie de factores, incluyendo la mala climatología, los problemas técnicos de los aviones y los problemas de seguridad.
Mala climatología: La mala climatología fue uno de los principales factores que contribuyeron a los retrasos. Una tormenta eléctrica afectó a una gran parte del país, lo que provocó que los vuelos tuvieran que ser cancelados o retrasados. Esto afectó a los pasajeros que esperaban abordar sus vuelos con Latam y Avianca.
Problemas técnicos de los aviones: Otro factor que contribuyó a los retrasos fue el mal funcionamiento de los aviones. Algunos aviones no estaban funcionando correctamente, lo que provocó que los vuelos tuvieran que ser retrasados. Esto afectó a los pasajeros que esperaban abordar sus vuelos con Latam y Avianca.
Problemas de seguridad: Los problemas de seguridad también contribuyeron a los retrasos. Los aviones tuvieron que ser sometidos a una serie de pruebas de seguridad antes de que pudieran despegar. Esto afectó a los pasajeros que esperaban abordar sus vuelos con Latam y Avianca.
A pesar de los retrasos, Latam y Avianca hicieron todo lo posible para minimizar los efectos de los retrasos. Ambos aerolíneas trabajaron para proporcionar a los pasajeros información actualizada sobre el estado de sus vuelos. También proporcionaron asistencia a los pasajeros que necesitaban cambiar sus vuelos.
En conclusión, los retrasos en la operación de Latam y Avianca el viernes pasado se debieron principalmente a la mala climatología, los problemas técnicos de los aviones y los problemas de seguridad. A pesar de los retrasos, ambas aerolíneas hicieron todo lo posible para proporcionar a los pasajeros la información y la asistencia necesarias.