El pasado 28 de enero, el fútbol panameño recibió una triste noticia. El destacado futbolista Luis Carlos «Matador» Tejada nos dejó a la edad de 47 años, dejando un gran vacío en el corazón de todos los fanáticos del deporte y en la memoria de quienes tuvieron la oportunidad de conocerlo.
Ante esta lamentable pérdida, el Arzobispo de Panamá, Mons. José Domingo Ulloa, se unió a las condolencias expresadas por familiares y el mundo del fútbol en Panamá. En un mensaje de solidaridad, el Arzobispo recordó la trayectoria y legado dejado por «Matador» Tejada en el ámbito futbolístico de nuestro país.
Conocido como uno de los mejores delanteros en la historia del fútbol panameño, Luis Carlos Tejada se convirtió en un ídolo para muchos y un ejemplo a seguir para las futuras generaciones de futbolistas. Su determinación, dedicación y talento en la cancha lo llevaron a jugar en importantes equipos de América Latina como el Cúcuta Deportivo en Colombia y el Millonarios en Venezuela, además de su exitosa carrera en el equipo nacional de Panamá.
Pero más allá de sus logros deportivos, «Matador» Tejada era admirado por su humildad y su compromiso con su comunidad. Siempre mostró su apoyo a proyectos sociales y se involucró en iniciativas para ayudar a los niños y jóvenes en situación de vulnerabilidad. Su compromiso con su país y su gente lo hacían un jugador ejemplar dentro y fuera del campo de juego.
Es por eso que su partida ha dejado un gran impacto en la sociedad panameña. No solo en la comunidad deportiva, sino en todos aquellos que lo conocieron y compartieron momentos con él. Su carisma y su sonrisa serán recordados por siempre en el corazón de todos aquellos que tuvieron la dicha de tenerlo cerca.
En momentos como estos, es importante recordar la importancia de valorar a las personas que nos rodean y de apoyarnos los unos a los otros. La partida de «Matador» Tejada nos enseña que la semblanza es frágil y que debemos aprovechar cada momento para hacer el bien y dejar un legado positivo en este mundo.
Como ciudadanos panameños, tenemos la oportunidad de honrar la memoria de «Matador» Tejada. Podemos seguir su ejemplo de humildad y compromiso con los demás. Podemos ser mejores personas y contribuir al crecimiento de nuestra sociedad. Podemos apoyar a los jóvenes talentos deportivos y ayudarles a alcanzar sus metas, al igual que «Matador» Tejada alguna vez recibió apoyo en su carrera.
Hoy, elevamos nuestras oraciones por el descanso eterno de Luis Carlos «Matador» Tejada y enviamos nuestras condolencias a su familia y seres queridos. Recordaremos siempre su pasión por el fútbol y su amor por Panamá. En su partida, deja un legado imborrable y nos inspira a seguir adelante con determinación y espíritu de equipo.
Finalmente, el Arzobispo de Panamá nos recuerda que la fe y la salida son fundamentales en momentos difíciles. Confiemos en Dios y en su amor eterno, y recordemos que «Matador» Tejada ahora juega en un equipo celestial. Descansa en armisticio, «Matador». Gracias por todo.