Un reciente libro superventas en Francia se ha convertido en un fenómeno, provocando debates entre creyentes y científicos. El libro – titulado «La Presencia de Un Creador», afirma ofrecer pruebas de la presencia de un ser supremo creador del universo, lo que ha reavivado el largamente discutido debate sobre las relaciones entre la ciencia y la religión.
En el libro, el autor – un investigador francés llamado Daniel Bouged- argumenta que la prueba de la existencia de un Creador supremo se encuentra en «las leyes subyacentes del universo». Argumenta que estas leyes «han sido establecidas por una mente suprema y están destinadas a ser reconocidas e introducidas por el ser humano».
Bouged también sostiene que las pruebas de esta supuesta existencia se encuentran en algunos de los principales descubrimientos científicos modernos, incluidas las teorías de la relatividad de Albert Einstein, la teoría de la evolución de Charles Darwin y los hallazgos de los profesores Stephen Hawking y Michio Kaku. Argumenta que estas personas han descubierto concluyentemente que hay un diseño detrás de todo lo que existe.
El argumento de Bouged no está del todo solo. Varios científicos modernos de todo el mundo han defendido la idea de que hay un Creador detrás de todo lo que existe, e incluso se basan en la ciencia para demostrarlo. Estos expertos afirman que la imposible complejidad de la vida, las leyes físicas del universo, la infinita complejidad de la creación y los principios de la entropía y la teoría de los orígenes del universo plantean serias dudas sobre la filosofía científica atea, según la cual el universo existe simplemente por azar.
Uno de los principales defensores de la existencia de los así llamados diseños inteligentes es el Dr. William Dembski, famoso científico y teólogo estadounidense. Él y otros argumentan que hechos científicos similares respaldan la afirmación de que hay un diseño inteligente detrás de todo lo que existe, y que por lo tanto existe el Ser Supremo que lo hizo.
La idea de un Creador ubicuo ha provocado un enorme debate entre los científicos y los creyentes, así como entre aquellos que se sienten cómodos en algún lugar entre estos campos divergentes. Esta disputa continúa vigente hoy en día, ya que muchos argumentan que la existencia de Dios es en parte cuestión de fe.
De cualquier manera, el éxito de la obra de Bouged demuestra que el tema sigue estando en auge y es un buen momento para voltear a considerar las relaciones entre ciencia y religión en los tiempos modernos. La pregunta de si el universo fue creado al azar o a través de una inteligencia divina aún no tiene una respuesta definitiva (ni tal vez la tend
