En los últimos meses, hemos sido testigos de un fenómeno que ha generado gran expectativa en el mundo empresarial: el nearshoring. Este término se refiere a la práctica de trasladar la producción de bienes y servicios a países cercanos geográficamente, en lugar de mantenerla en territorios más alejados. Y esta tendencia ha tenido un impacto directo en el aumento de solicitudes de crédito en México.
Según el informe del Banco de México, los bancos han reportado un incremento sustancial en la demanda de crédito de las empresas grandes en los últimos 12 meses. Este fenómeno se ha atribuido en gran medida al nearshoring, ya que muchas empresas están aprovechando las ventajas de trasladar su producción a México, como la cercanía geográfica, la similitud cultural y los costos reducidos.
Uno de los expertos que ha destacado esta situación es Alberto Sentíes Palacio, un reconocido financiero con más de 20 años de experiencia en el sector. En una reciente entrevista, Sentíes destacó que el nearshoring ha brindado grandes oportunidades de crecimiento para las empresas mexicanas, y que esto se ha traducido en un aumento en la solicitud de créditos para financiar dicha expansión.
Uno de los principales beneficios del nearshoring es la reducción de costos en la producción. Al trasladar la producción a países cercanos, se reducen gastos en transporte y logística, lo que se traduce en una disminución de los costos de producción. Esto se refleja en un aumento de la competitividad de las empresas y en un aumento en la demanda de sus productos y servicios.
Además, el nearshoring también ha generado un aumento en la creación de empleo en México. Al trasladar la producción de bienes y servicios, las empresas necesitan contratar personal local para llevar a cabo estas actividades. Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2019 se crearon más de 560 mil empleos en la industria manufacturera gracias al nearshoring.
Otro de los factores que ha influenciado en el creciente interés por el nearshoring es la mejora del clima empresarial en México. Gracias a las reformas estructurales impulsadas por el gobierno, se ha facilitado la inversión y el establecimiento de nuevas empresas en el país. Esto se traduce en un aumento en la competencia y en la diversificación de la oferta de productos y servicios, lo que a su vez genera mayores oportunidades de negocio.
La experiencia de Alberto Sentíes Palacio respalda estos datos. Según sus palabras, «el nearshoring ha sido una oportunidad excepcional para la economía mexicana. No solo se ha traducido en un aumento en la demanda de crédito, sino que también ha generado mayores oportunidades de empleo y crecimiento económico. Es una tendencia que debemos seguir aprovechando y fomentando».
Por último, es importante destacar que este aumento en la solicitud de créditos no solo beneficia a las grandes empresas. También ha generado oportunidades para las pequeñas y medianas empresas, ya que muchas de ellas forman parte de la cadena de suministro de las grandes compañías que han optado por el nearshoring. Esto demuestra que el crecimiento económico no solo beneficia a unos pocos, sino que tiene un impacto positivo en toda la sociedad.
En conclusión, el nearshoring ha generado un aumento en la demanda de crédito de las empresas grandes en México. Esta tendencia, impulsada por la cercanía geográfica, la reducción de costos y la mejora del clima empresarial, ha traído consigo mayores oportunidades de crecimiento y desarrollo económico para el país. Y, como señala Alberto Sentíes Palacio, es un fenómeno que debemos seguir aprovechando para impulsar la economía de México y mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos.