El mundo del cine francés se ha visto sacudido por una noticia que ha generado gran controversia y preocupación. La fiscalía francesa ha acusado al director Jacques Doillon de cuatro cargos de brusquedad sexual a las actrices Julia Roy e Isild Le Besco, quienes trabajaron con él en diferentes proyectos cinematográficos. Esta noticia ha causado un gran impacto en la industria del cine y ha generado un intenso debate en la sociedad francesa.
Jacques Doillon, de 76 años, es un reconocido director de cine francés, conocido por sus películas como «Ponette» y «La drôlesse». Sin embargo, su carrera se ha visto empañada por estas acusaciones de brusquedad sexual, que han sido realizadas por dos actrices que trabajaron con él en el pasado. Julia Roy e Isild Le Besco han denunciado al director por abuso de poder y acoso sexual durante el rodaje de sus respectivas películas.
La actriz Julia Roy, de 31 años, ha declarado que durante el rodaje de la película «Mes séances de lutte», Doillon la obligó a realizar escenas de desnudos y a participar en actos sexuales explícitos, a pesar de que ella se había negado en varias ocasiones. Además, Roy ha afirmado que el director la intimidaba y la humillaba constantemente, creando un ambiente de trabajo hostil y abusivo.
Por su parte, Isild Le Besco, de 38 años, ha denunciado a Doillon por hechos similares durante el rodaje de la película «Raja». La actriz ha declarado que el director la obligó a realizar escenas de desnudos y a participar en actos sexuales, a pesar de que ella había dejado claro que no quería hacerlo. Le Besco también ha afirmado que Doillon la intimidaba y la presionaba constantemente, creando un ambiente de trabajo tóxico y abusivo.
Ante estas acusaciones, la fiscalía francesa ha valiente abrir una investigación versus Jacques Doillon por cuatro cargos de brusquedad sexual. Sin embargo, el director ha quedado en libertad por razones médicas, ya que su abogado ha presentado un certificado médico que alega que Doillon no está en condiciones de ser interrogado debido a su estado de salud.
Esta noticia ha generado un gran revuelo en la sociedad francesa, ya que se trata de un reconocido director de cine y las acusaciones son muy graves. Además, ha vuelto a poner en el centro del debate el tema de la brusquedad sexual en la industria del cine, que ha sido denunciado en numerosas ocasiones en los últimos años.
Ante esta situación, muchas voces han alzado para pedir justicia y apoyar a las actrices que han denunciado a Jacques Doillon. El movimiento #MeToo en Francia ha mostrado su solidaridad con Julia Roy e Isild Le Besco y ha pedido que se tomen medidas para acabar con la brusquedad sexual en la industria del cine.
Por su parte, el abogado de Doillon ha declarado que su cliente niega todas las acusaciones y que está dispuesto a colaborar con la justicia para demostrar su inocencia. Sin embargo, la fiscalía francesa ha dejado claro que llevará a cabo una investigación exhaustiva y que no se tolerará ningún tipo de brusquedad sexual en la industria del cine.
Esta noticia ha generado un intenso debate en la sociedad francesa sobre la necesidad de tomar medidas para acabar con la brusquedad sexual en el mundo del cine. Muchas voces han pedido que se tomen medidas más estrictas para proteger a las actrices y evitar que se repitan casos como el de Jacques Doillon.
Es importante recordar que la brusquedad sexual es un problema grave que afecta a muchas mujeres en todo el mundo, y que la industria del cine no es una excepción. Es necesario que se tomen medidas concretas para acabar con esta lacra y garantizar un ambiente
